Las plazas.
Praza do Obradoiro: catedral de Santiago de Compostela (A Coruña), Pazo de Raxoi, Colegio de San Jerónimo, Hostal de los Reyes Católicos.
Las encontramos en todos los pueblos y ciudades, como lugares de encuentro cargados de historia en los que han acaecido numerosos acontecimientos. Es el centro de la población, un espacio urbano vital, el salón, el atrio en el que están las edificaciones representativas de los poderes (religioso-iglesia, político-ayuntamiento), y en el que se celebran funciones simbólicas, fiestas, espectáculos, mercadillos, etc. Suelen ser el lugar de los símbolos (monumentos, estatuas).
Plaza de la Leña, Pontevedra, la más pequeña y pintoresca del
casco antiguo, con un cruceiro que fue traído desde Caldas de Reis. Pazos
históricos del Museo Provincial.
La forma y el tamaño de la plaza no han influido generalmente en su función. Así las hay cuadrangulares (Plaza Mayor de Madrid; square en el urbanismo inglés, como Trafalgar),
Plaza Mayor de Madrid: casa de la Panadería, Arco de Cuchilleros, soportales, estatua de Felipe III.
Trafalgar Square
irregulares (medievales, del Campo de Siena),
elípticas (barroco, San Pedro en Roma),
rotonda (Cibeles en Madrid, circus en el urbanismo inglés como Piccadilly),
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L´Etoile, París |
semicircular (España en Sevilla),
alargada (Navona en Roma).
Las más habituales son de un solo nivel, pero las hay escalonadas (España en Roma).
El modelo de plaza mayor es cerrado, aunque hay abiertas, como la del Popolo en Roma.
Plazas abiertas por un lado: Comercio en Lisboa, de la Hora en Pastrana (Guadalajara).
Parece que su función siempre ha sido así. En la prehistoria era frecuente que las chozas se agruparan en círculo, dejando el espacio central como escenario de la vida comunitaria.
Es un órgano biológico y ha ido cambiando, asumiendo nuevas funciones como la de mercado. Tenemos en mente los ejemplos clásicos, el ágora griega o el foro romano, con su actividad comercial, judicial, religiosa y política;
pero hay otros ejemplos, en culturas como la celta, que tenía una distinta relación con la naturaleza y que tenía su templo en el bosque y sus lugares de reunión en campas.
La trama urbana cerrada de la ciudad medieval, en parte por influencia islámica, mantiene espacios delante de iglesias, palacios, ayuntamientos, etc.
![]() Piazza della Signoria, Florencia, por Bernardo Bellotto, 1742 |
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El crecimiento de los burgos dio lugar a la aparición de plazas de mercado, cerradas en ocasiones con arcos y soportales, situadas extramuros como la de Alcalá de Henares, Madrid.
También en las culturas precolombinas hay grandes explanadas ante los templos.
El barroco exigió perspectivas grandiosas en las que se integraron arquitectura, escultura, jardines y fuentes, devenidas éstas en obras de arte.
![]() Plaza Mayor de Salamanca, dieciochesca, estilo churrigueresco: Ayuntamiento. |
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En los ensanches del siglo XIX se reguló la función de mercado con un ideal higienista y se tendió a tramas abiertas con plazas. El siglo XX vio el cambio a la función viaria debido al tráfico, cuya saturación derivó a la peatonalización. El diseño más moderno tiende a desdibujar la diferencia plaza-calle mediante una arquitectura de bloque abierto.
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San Marcos, Venecia. |
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Vendôme, París. Plaza cerrada aunque con avenida
central. |
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Puerta del Sol, Madrid |
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