Mapa Teatro
Mapa Teatro se fundó en París, en 1984, por los hermanos
Heidi y Rolf Abderhalden Cortés,
artistas transdisciplinares, con el deseo de producción de Artes vivas, de un pensamiento-creación
que transgrede las fronteras geográficas, lingüísticas y disciplinares,
incorporando las problemáticas locales y globales en una especie de lugar donde
se desplazan continuamente el mito, la historia y la actualidad. No es un
colectivo teatral, sino un laboratorio de artistas.
La exposición “De los dementes, ò faltos de juicio”,
en el Museo Reina Sofía, es una
etno-ficción que parte de la historia del Edificio Sabatini, que fue sede del
Hospital General y de la Pasión de Madrid hasta 1968. Había sido fundado en el
s. XVI por Felipe II y, para salvarlo de la ruina, Fernando VI decretó que las
limosnas de la familia real y las procedentes de las Indias fuesen destinadas
al hospital. Desde 1749 fueron llegando cantidades considerables de oro para su
construcción.
Figura quimbaya (cacique precolombino), oro tumbaga, región de Marmato, Caldas, Colombia |
A finales del s. XVIII, Carlos III ordenó la creación de
una Real Compañía de Minas y envió al Virreinato de Nueva Granada (hoy
Colombia) a dos mineralogistas españoles para que aumentaran la rentabilidad de
la producción de oro en la zona de Marmato –tierra de la cultura precolombina
Quimbaya-. Don Ángel Díaz Castellanos sufrió los síntomas del auriferus
delirium, por lo que regresó a España y fue recluido en la Sala de Bóvedas.
“Y entonces, el
mineralogista Ángel Díaz regresó de las minas de Marmato en el Virreinato de la
Nueva Granada (hoy Colombia), poseído por el auriferus delirium e internado en
el Hospital General de la Pasión, Convalecientes y Faltos de Juicio, donde se
obsesionó hasta el final de sus días por extraer polvo de sol de las bóvedas oscuras
del hospital. Madrid, 1816.”
El continente americano aparece representado por un indígena con plumas y un collar de perlas, protegido del sol tropical y con unos lingotes de oro fundido a sus pies. |
Éste es el nexo de unión entre la minería en Nueva
Granada y el Hospital de la Pasión. Puente simbólico que enlaza el Hospital con
la Mina. Don Ángel Díaz Castellanos (que acabó sus días “demente”, recluido
entre las mismas paredes que ahora albergan esta exposición) actúa como
personaje relacional para la generación de la narrativa, los mineros son los
médiums que traen de vuelta al presente el delirio del oro.
Este delirio estuvo presente en el Discurso de aceptación
del Premio Nobel por parte de Gabriel García Márquez (Estocolmo, 1982): “El Dorado, nuestro país ilusorio tan
codiciado, figuró en mapas numerosos durante largos años, cambiando de lugar y
de forma según la fantasía de los cartógrafos. (…) Uno de los tantos misterios
que nunca fueron descifrados, es el de las once mil mulas cargadas con cien
libras de oro cada una, que un día salieron del Cuzco para pagar el rescate de
Atahualpa y nunca llegaron a su destino. Más tarde, durante la colonia, se
vendían en Cartagena de Indias unas gallinas criadas en tierras de aluvión, en
cuyas mollejas se encontraban piedrecitas de oro. Este delirio áureo de
nuestros fundadores nos persiguió hasta hace poco tiempo. Apenas en el siglo
pasado la misión encargada de estudiar la construcción de un ferrocarril
interoceánico en el istmo de Panamá, concluyó que el proyecto era viable con la
condición de que los rieles no se hicieran de hierro, que era un metal escaso
en la región, sino que se hicieran de oro”.
Sigue el delirio en una especie de monólogo interracial:
“Antes de que nosotros los negros
llegáramos, los indios vivían aquí, en este mismo sitio. Los indios vivían
debajo de la tierra y comían oro en platos de oro y bebían oro en tazas de oro,
y sus hijos jugaban con muñecas de oro. Cuando llegamos, los indios huyeron por
debajo de la tierra hasta las montañas donde comienzan los ríos. Cuando
salieron, grandes pájaros blancos los atacaron, los desangraron; pocos indios
quedaron vivos. Pero antes de huir los indios cogieron todo el oro y sus tazas
llenas de piñas de oro y las muñequitas de oro y despedazaron todo con los pies
y las manos, y volvieron todo polvo de oro… Ahora los negros tenemos que
rompernos el cuerpo para encontrar el polvo de oro para las compañías
transnacionales y poder mantenernos vivos en los sitios donde antes de ser
aniquilados vivieron los indios.”
Mapa Teatro ha rastreado las huellas de Don Ángel en la
región aurífera de Caldas. Se ha reconstituido su itinerario hasta llegar a la
mina de Marmato, explotada desde antes de la Conquista y productiva desde
entonces, que resistió al control por parte de los actores del conflicto
armado, que ha resistido la penetración de las multinacionales mineras (que
promueven la extracción a cielo abierto) por la fortaleza de una comunidad
autorreguladora que ha preservado la montaña de Marmato, horadada por túneles,
muchos de ellos centenarios, como una isla barroca, circundada por las amenazas
del extractivismo industrial y la minería ilegal de oro.
“La grieta del oro.
La fisura que abre Mapa Teatro habla de una grieta lejana, aún sin cerrar,
lugar de explotación y deseo, de ingenio y brutalidad, de resistencia y olvido”
(José A. Sánchez).
Me pareció la exposición magnífica- Probablemente Garbriel Garcia Marquez no inventó el realismo mágico, simplemente supo oir y plasmar esto en magníficos escritos- Las historias de locura y cordura son la misma imagen en positivo y en negativo, sin saber claramente cual es cual.
ResponderEliminarLa he visto varias veces y te vas dando cuenta que la cruzan muchos rios